Que si, que ya lo se. Que son tres meses. Dos de playa y uno
de depresión. Que si Isabel por aquí, que si Isabel por allá, que ahora tienes
que hacer esto y después lo otro. Que la vuelta al trabajo me ha costado, que
no he asimilado bien el tema de la gente que se ha ido y que ya no volverá, que no es que les haya pasado nada,
que un día puedo encontrarme con ellos y tomarme una cerveza o darles un
abrazo.
Me olvidé de el Bomboncito y de sus ojos azules en cuanto Efe
me prestó